10/07/2021
El prestigioso "sello amarillo" ofrece para 2021 una serie de grabaciones en vídeo en su web, procedentes de ediciones anteriores del Festival, con el aliciente de que todas ellas son gratuitas excepto la del estreno del Holandés en la nueva producción de Dmitri Tcherniakov, con dirección musical de Oksana Lyniv, que estará disponible a partir del 27 de julio. Repasamos fechas, títulos y principales alicientes de los registros ofrecidos.
Debido a un acuerdo de colaboración de Deutsche Grammophon con el Festival y la Sociedad de Amigos de Bayreuth, junto con el patrocinio de Siemens, este verano podrá verse en su web una serie de grabaciones en vídeo de los últimos años, para cuyo acceso bastará con registrarse. Sólo el estreno de la nueva producción del Holandés será de pago, con un coste de 9,90 euros y podrá verse, en cualquier momento, entre el 27 de julio y el 2 de agosto. El resto de títulos estarán disponibles por un plazo de cuarenta ocho horas desde cada una de las fechas indicadas, comenzando a las 16 horas.
Todos los títulos ofrecidos proceden de las últimas premieres, de las cuales DG ha venido obteniendo los derechos para su grabación y edición desde 2015, cuando tomó el relevo del sello británico Opus Arte, quien llevaba sacando al mercado grabaciones del Festival desde 2008. Se exceptúa el Anillo en la producción de Frank Castorf con dirección musical de Marek Janowski, un registro correspondiente al segundo ciclo de 2016 que fue en su momento dado en plataforma digital y del que desconocemos quién fue el productor, pero que ahora aparece en esta iniciativa del sello amarillo. No está oficialmente publicado, aunque circula por la red, y confiamos en que pueda ser un primer paso para que DG valore realizar una edición.
Dicho esto, procedemos a comentar cada uno de los títulos ofrecidos.
EL HOLANDÉS ERRANTE. Nueva producción del Festival de Bayreuth 2021 debida Dmitri Tcherniakov, con dirección musical de Oksana Lyniv. John Lundgren (Holandés), Asmik Grigorian (Senta), Georg Zeppenfeld (Daland), Eric Cuttler (Erik), Marina Prudenskaya (Mary), Attilio Glaser (Timonel).
La inauguración del certamen del próximo 25 de julio aparecerá en la plataforma del sello amarillo el martes 27 y estará disponible hasta el 2 de agosto. La nueva producción está siendo un absoluto secreto, e incluso hay demasiada tranquilidad frente a contratiempos de última hora que han surgido en los estrenos de otros años, con polémicas entre directores musicales y de escena o de éstos con los cantantes. Tcherniakov ha desarrollado en los últimos años un equipo estrecho con Daniel Barenboim en la Staatsoper de Berlín, donde ya han llevado a escena Tristán y Parsifal -este último editado por BelAir Classics (2015)-. Se trata de un director polémico, pero a la vez con un fuerte mensaje en sus propuestas, por lo que es probable que no deje indiferente a nadie, para bien o para mal.
En cuanto al reparto, sobre el papel ofrece muy buenas expectativas, con habituales del Festival como John Lundgren -a nuestro juicio probablemente el mejor Holandés posible-, Georg Zeppenfeld como Daland o Marina Prudenskaya como Mary. Espectación por el debut de Asmik Grigorian como Senta.
LOS MAESTROS CANTORES DE NUREMBERG. Grabación del estreno de la producción de Barrie Kosky (2017), aun en cartel, con dirección musical de Philippe Jordan. Michael Volle (Sachs), Klaus Florian Vogt (Walther), Daniel Behle (David), Anne Schwanewilms (Eva), Wiebke Lehmkuhl (Magdalena), Johannes Martin Kränzle (Beckmesser), Günther Gröissbock (Pogner) y Georg Zeppenfeld (Sereno).
Una producción divertida y cargada de buen humor en el mejor concepto de Barrie Kosky, con Maestros convertida en un juicio a la propia obra y al arte de Wagner. Sachs, Walther y David son proyecciones del propio Wagner, Eva de Cósima, Pogner de Liszt y Beckmesser de Hermann Levi. Sorprende el primer acto, desarrollado en la vida Wahnfried, y la sala de los juicios de Nuremberg en el tercero, invadida por aldeanos y artesanos en la fiesta de la pradera. Magnífica dirección de actores, fresca y natural, y detallado vestuario.
Notable reparto, en el que es uno de los Maestros mejor cantados de los últimos veinticinco años, y sin duda el mejor en la concepción dramática de sus personajes. Michael Volle no tiene la voz más potente y sonora para Sachs, ni tampoco la más bella, pero su fraseo e intención dramática es indudable.
Podrá verse el 26 de julio y el 24 de agosto.
EL ANILLO DEL NIBELUNGO. Grabación de 2016 de la producción de Frank Castorf estrenada en 2013 y en cartel hasta 2017, con dirección de Marek Janowski. Iain Paterson/John Lundgren (Wotan), Albert Dohmen (Alberich), Sarah Connolly (Fricka), Roberto Saccà (Loge), Christopher Ventris (Sigmundo), Heidi Melton (Sieglinde), Catherine Foster (Brunilda), Stefan Vinke (Sigfrido), Georg Zeppenfeld (Hunding), Markus Eiche (Donner/Gunther), Günther Groissböck (Fasolt), Karl-Heinz Lehner (Fafner) y Stephen Milling (Hagen).
Polémica producción que enfoca la Tetralogía como una alegoría sobre la lucha por el oro negro y la decadencia a la que lleva el capitalismo. Las cuatro partes no tienen conexión argumental entre sí, desarrollándose el Oro en un motel en la Ruta 66, Valquiria en Azerbayán, Sigfrido en Berlín y el Ocaso en Nueva York. Dirección de actores atenta, aunque al servicio de la propuesta de Castorf, exasperante por momentos. Impresionantes los decorados giratorios de Alecsandar Denic.
Vocalmente se trata de una de las Tetralogías mejor cantadas de los últimos años, saliendo airosa del empeño con notabilidad, lo cual para los tiempos actuales es decir mucho. El elenco en conjunto deja mejor sabor de boca que las dos Tetralogías grabadas por Thielemann -Bayreuth 2008 (Opus Arte) y Staatsoper de Viena 2011 (DG)- o la de Barenboim en la Scala (2012, Arthaus) o Weigle en Frankfurt (Oehms, 2012), teniendo en cuenta además que estas dos últimas están grabadas a lo largo de años diferentes, aunque la dirección de Janowski a veces es demasiado viva y con preponderancia del metal, con cierta rutina de buen saber hacer pero no de genialidad, no superando el hito marcado por Thielemann en 2008.
Destacan las voces graves masculinas -magníficos John Lundgren, Albert Dohmen, Günther Groissböck, Georg Zeppenfeld y Stephen Milling-. Arrojado Stefan Vinke como Sigfrido, de resonantes agudos, y Brunilda tersa y lacerante de Catherine Foster. Lírico Christopher Ventris como Sigmundo y desmerecen un poco Iain Paterson como un temblón Wotan en el Oro -el gran fallo de Janowski fue contar con varios cantantes para el rol de Wotan, llegando a tener tres al año siguiente- y Heidi Melton en su única aparición en Bayreuth, Sieglinde con problemas de colocación del agudo.
El Oro podrá verse el 30 de julio, La Valquiria el 6 de agosto, Sigfrido el día 15 y el Ocaso el día 21. Si hay que decantarse por una de ellas, escénicamente la más interesante es la Valquiria -que se llegó a ofrecer separadamente en 2018-. Vocalmente y marcando el punto más alto en la dirección, Sigfrido.
LOHENGRIN. Grabación del estreno de la producción de Yuval Sharon (2018), aun en cartel, con dirección musical de Christian Thielemann. Piotr Beczala (Lohengrin), Anja Harteros (Elsa), Tomasz Konieczny (Telramund), Waltraud Meier (Ortrud), Georg Zeppenfeld (Rey Enrique) y Egils Silins (Heraldo).
Una de las versiones en vídeo que recomendamos de la obra. Reproducimos nuestro comentario: Producción muy particular de Yuval Sharon, con decorados azules de los pintores Neo Rauch y Rosa Loy. Musicalmente es la mejor versión en vídeo. Thielemann repite su excelente dirección con un elenco superior al de Dresde. Repiten Piotr Beczala (Lohengrin, aquí con el papel más redondeado), Tomasz Konieczny (Telramund, con una voz más oscura) y Georg Zeppenfeld (noble Rey Enrique). Delicada Elsa de Anja Harteros y dramáticamente imponente Waltraud Meier como Ortrud, ya pasado su mejor momento vocal pero impartiendo verdaderas lecciones canoras. Poderoso Heraldo de Egils Silins. El inconveniente es el eclecticismo de decorados y vestuario, a medio camino entre un mundo de hadas y un pueblecito de principios del siglo XX (...).
Podrá verse el 31 de julio. Si queremos disfrutar de buen canto, ésta es una buena oportunidad.
TANNHÄUSER. Grabación del estreno de la producción de Tobias Kratzer (2019), aun en cartel, con dirección musical de Valery Gergiev. Stephen Gould (Tannhäuser), Lise Davidsen (Elisabeth), Elena Zhidkova (Venus), Markus Eiche (Wolfram), Stephen Milling (Landgrave), Daniel Behle (Walther), Kay Stiefermann (Biterolf), Jorge Rodríguez-Norton (Heinrich), Wilhelm Schwinghammer (Reinmar), Katharina Konradi (Pastor).
El último estreno del Festival antes de la pandemia. Teatro dentro del teatro, donde la producción nos narra la vida de un Tannhäuser titiritero que vive con una Venus hippie y dos simpáticos artistas -Le Gateau Chocolat y Oskar-. Una vuelta de tuerca diferente, no apta para todos los gustos, pero que no deja de tener cierta gracia. Sólido reparto, con la mejor pareja protagonista de nuestros días. La Venus de Elena Zhidkova es poderosa pero algo monocromática, mientras que Markus Eiche es efectivo como Wolfram, sin ser especialmente ensoñador. Valery Gergiev optó por una dirección muy ligera, bien articulada, dentro de una lectura personal más próxima a la tradición rusa que a la germana, con bruscos contrastes y explosiones sonoras en los clímax. Hay mayor interés por los pasajes más electrizantes que por los ascéticos.
Podrá verse el 2 y el 26 de agosto.
TRISTÁN E ISOLDA. Grabación de la producción de Katharina Wagner en el año del estreno (2015) -no me consta que sea la premiere-, en cartel hasta 2019, y con dirección de Christian Thielemann. Stephen Gould (Tristán), Evelyn Herlitzius (Isolda), Iain Paterson (Kurwenal), Christa Mayer (Brangania), Georg Zeppenfeld (Rey Marke), Raimund Nolte (Melot), Tansel Azkeybek (Pastor y Joven Marino) y Kay Stiefermann (Timonel).
Esta producción estuvo marcada por la polémica, debido a las diferencias que surgieron entre Kirill Petrenko y Christian Thielemann semanas antes del estreno por la titularidad de la Filarmónica de Berlín, y que parece ser que se tradujo en un mal clima de trabajo entre Anja Kampe -la Isolda inicialmente prevista, pareja de Petrenko- y Thielemann, lo que condujo a la salida de la soprano de la producción y a la búsqueda en el último momento de una sustituta, Evelyn Herlitzius, de agudo abierto y abrasado. Una pena, pues el resto del reparto se mueve a buen nivel, con un Gould baritonal que sin duda se afianzaría en años posteriores y unos excelentes Brangania (Christa Mayer) y Rey Marke (Georg Zeppenfeld, quien se alternaría con René Pape en años posteriores). Dirección hedonista y sutilísima de Christian Thielemann, atento a los detalles más mínimos de la partitura. Una grabación posterior hubiera afianzado el reparto.
El montaje de Katharina Wagner es oscuro y de fuerte carga simbolista, con algunos detalles de enorme saber hacer -inicio del primer acto, delirios de Tristán- y otros no tan logrados -la tienda de campaña que cobija a los amantes en el foso en que se desarrollo el segundo acto-, por lo que también resulta irregular.
Podrá verse el 9 de agosto. A nuestro juicio, el menos recomendable de los registros propuestos.
PARSIFAL. Grabación del estreno de la producción de Uwe Eric Laufenberg (2016), en cartel hasta 2019, con dirección musical de Hartmut Haenchen. Klaus Florian Vogt (Parsifal), Georg Zeppenfeld (Gurnemanz), Elena Pankratova (Kundry), Ryan McKinny (Amfortas), Karl-Heinz Lehner (Titurel) y Gerd Grochowski (Klingsor).
Estreno que vino acompañado de bastantes desencuentros. Laufenberg hubo de hacerse cargo del montaje después de que el director de escena inicialmente propuesto declinara continuar año y medio antes del estreno, por cuestiones presupuestarias. Haenchen hubo de salir de sus vacaciones de verano tres semanas antes del estreno para sustituir a Andris Nelsons, quien abandonó el Festival por considerar que Thielemann se inmiscuía en su criterio artístico, asistiendo incluso a los ensayos y dando indicaciones a la orquesta. El resultado fue un éxito. Propuesta sencilla y emotiva de Laufenberg, que ambienta la obra en nuestro tiempo en algún lugar de Oriente Próximo, donde una sencilla comunidad intenta sobrevivir. Dirección nítida, clara y bien articulada de Haenchen, muy didáctica y alejada de personalismos. Magnífico reparto sin fisuras, aunque Vogt no se apasione mucho en el dúo del segundo acto y Pankratova destaque más por su imponente vocalidad que por la dimensión psicológica del personaje. El Gurnemanz de Zeppenfeld es la humanidad personificada. Última grabación del repentinamente fallecido Gerd Grochowski.
Puede verse el 10 de agosto y en nuestra opinión es para no perdérselo.
En definitiva, un buen surtido del Canon de Bayreuth completo, de buen nivel y con producciones modernas pero que a la vez han sabido hacerse un hueco entre todos los sectores. Si tenemos que escoger una producción para ver, ésta sería Maestros, mientras que las dos veladas de mayor nivel vocal son Lohengrin y Parsifal.
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